Los beneficios para la salud de los germinados constituyen una lista impresionante, y pueden incluir la capacidad de mejorar el proceso digestivo, impulsar el metabolismo, aumentar la actividad enzimática en todo el cuerpo, prevenir la anemia, ayudar a la pérdida de peso, reducir el colesterol, reducir la presión arterial, prevenir los defectos del tubo neural en los bebés, impulsar la salud de la piel, mejorar la visión, apoyar el sistema inmunológico y aumentar las reservas de energía utilizables.
¿Qué son los germinados?
Los germinados pueden referirse a una serie de hortalizas o plantas después de que empiecen a crecer. Los germinados más comunes que la gente utiliza habitualmente en la cocina son los de alfalfa, soja y judía mungo, así como otros tipos de brotes de judías.
La razón por la que tanta gente recurre a los germinados como fuente de alimento es que contienen una cantidad significativa de vitaminas y nutrientes que no están presentes en la forma no germinada.
Normalmente, una semana después de la germinación, los brotes tendrán la mayor concentración y biodisponibilidad de nutrientes.
Las semillas contienen un almacén repleto de todos los nutrientes importantes que una planta necesitará para crecer en sus primeros días, por lo que esas pequeñas tapas están llenas de importantes compuestos orgánicos, vitaminas y minerales que nuestro cuerpo también puede utilizar.
Hay varias culturas que valoran mucho los germinados como elemento esencial de su alimentación.
Aunque se pueden cultivar en cualquier lugar, a menudo se encuentran como aderezo de diversos platos en la cocina asiática, así como un ingrediente común en las ensaladas.
Se pueden encontrar fácilmente en cualquier mercado.
Lo importante es recordar que parte del valor nutritivo de los germinados se pierde al calentarlos.
La mayoría de las veces, los germinados se añaden a la comida en su forma cruda, tanto por su sabor como para garantizar que tengan el mayor impacto nutritivo.
Sin embargo, debido al riesgo de intoxicación alimentaria, las personas consideradas de alto riesgo deben cocinar bien los germinados antes de consumirlos, según la Academia de Nutrición y Dietética.
Entre las personas de alto riesgo se encuentran las mujeres embarazadas, las personas con un sistema inmunitario debilitado, los niños pequeños o los ancianos.
Ahora, exploremos lo que hace que los germinados sean una fuente tan poderosa, aunque ignorada, de tantos beneficios para la salud.
Datos nutricionales de los germinados
Todos los beneficios nutricionales y medicinales de los germinados se derivan de su impresionante contenido en vitaminas, minerales y compuestos orgánicos.
Pueden contener una cantidad significativa de proteínas y fibra dietética, así como vitamina K, folato, ácido pantoténico, niacina, tiamina, vitamina C, vitamina A y riboflavina.
En cuanto a los minerales, contienen zinc, magnesio, hierro y calcio.
Muchos de los nutrientes de estos componentes pueden aumentar drásticamente a medida que el germinado se va desarrollando.
Junto con todos estos componentes, los germinados también pueden ser una rica fuente de enzimas que son esenciales para la salud.
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Beneficios de los germinados para la salud
Ahora, ¡exploremos algunos de los fascinantes y vitales beneficios para la salud que los germinados tienen para nosotros!
Pueden mejorar la digestión
Una de las mejores cosas de los germinados es que pueden contener un número inusualmente alto de enzimas.
Esto puede ayudar a impulsar varios procesos metabólicos y reacciones químicas dentro del cuerpo, específicamente cuando se trata de la digestión.
Las enzimas son una parte importante del proceso digestivo, y pueden ayudar a descomponer los alimentos de manera eficaz y pueden aumentar la absorción de nutrientes por el tracto digestivo.
Además, la fibra dietética de los germinados podría convertirlos en un importante impulso para las funciones digestivas.
La fibra abulta las heces, facilitando su paso por el tracto digestivo. La fibra dietética también puede estimular los jugos gástricos, que pueden ayudar a las enzimas que ya se encuentran en los germinados a descomponer los alimentos de forma eficaz y eficiente.
Pueden ser una buena forma de eliminar el estreñimiento y la diarrea.
Pueden aumentar el metabolismo
Como ya se ha mencionado, los germinados contienen una gran cantidad de enzimas.
Esta gran afluencia representa un puntapié inicial para el cuerpo, y puede impactar seriamente su actividad metabólica.
Además, los germinados también pueden contener una cantidad significativa de proteínas, según un informe publicado en The Journal of Nutrition.
Las proteínas son necesarias para casi todos los procesos corporales, en particular la creación y el mantenimiento de las células, la reparación de órganos, la regeneración de la piel, el crecimiento de los huesos y el desarrollo muscular.
Esto significa que los germinados son una forma fácil y deliciosa de mejorar el funcionamiento y el desarrollo general del organismo.
Este alto contenido nutritivo también puede ser la razón por la que los germinados son tan recomendados para los vegetarianos y veganos como una importante fuente de proteínas.
Pueden prevenir la anemia
Anemia es la palabra técnica que designa ciertas deficiencias de nutrientes. Una causa común de anemia es la deficiencia de hierro.
Si no se consumen suficientes alimentos con hierro, el cuerpo no puede producir suficiente hemoglobina, que es esencial para que los glóbulos rojos puedan transportar oxígeno.
Esto puede provocar fatiga, falta de concentración, náuseas, mareos y trastornos estomacales.
Si mantienes tu recuento de glóbulos rojos con las cantidades adecuadas de hierro, podrás asegurar una mejor circulación sanguínea en tu cuerpo, aumentando así la oxigenación de tus sistemas orgánicos para optimizar su rendimiento.
Pueden promover la pérdida de peso
Los germinados son uno de esos alimentos que pueden ser muy ricos en nutrientes pero muy bajos en calorías. Esto significa que puedes comerlos sin preocuparte de comprometer tu dieta.
En un estudio realizado en Corea, se administró extracto de germinados de brócoli a ratas que habían sido alimentadas previamente con una dieta alta en grasas, y estas mostraron una importante pérdida de peso, así como de grasa.
Además, la fibra de los germinados puede ayudar a que te sientas lleno, tanto por añadir volumen a tus intestinos como por inhibir la liberación de grelina, que es la hormona del hambre que indica a nuestra mente que estamos listos para comer algo.
Esto puede reducir el picoteo y el exceso de comida entre horas, dos de los mayores problemas para alguien que sufre el problema de la obesidad.
Pueden mejorar la salud del corazón
Los germinados pueden ser una gran fuente de ácidos grasos omega 3, especialmente de ácido alfa-linolénico (ALA), que es un ácido graso esencial.
Las dietas ricas en ácidos grasos omega 3 pueden realmente reducir los triglicéridos en la sangre y se ha demostrado que mejoran el HDL o colesterol saludable, aunque las pruebas de esto son inconsistentes.
Un estudio realizado por el Centro de Genética de Washington DC (EE.UU.) confirmó que los germinados tienen un alto contenido en antioxidantes y omega 3.
Los ácidos grasos omega-3 son también de naturaleza antiinflamatoria, por lo que pueden reducir el estrés en el sistema cardiovascular.
El contenido de potasio de los germinados también puede ayudar a reducir la presión arterial, ya que el potasio es un vasodilatador y puede liberar la tensión de las arterias y los vasos sanguíneos.
Esto aumenta la circulación y la oxigenación, al tiempo que reduce la coagulación y disminuye el riesgo de aterosclerosis, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Pueden prevenir los defectos del tubo neural
Los defectos del tubo neural son uno de los efectos secundarios más comunes de una deficiencia de folato, una vitamina B que es increíblemente importante especialmente para las mujeres embarazadas.
Los brotes parecen tener una cantidad significativa de folato, y por lo tanto, pueden proteger a los bebés de esta trágica condición.
Pueden reforzar el sistema inmunológico
Hay una serie de factores que pueden hacer que los germinados sean un poderoso refuerzo para el sistema inmunológico.
Su contenido de vitamina C por sí solo puede convertirlo en un potente estimulante de los glóbulos blancos del cuerpo para combatir infecciones y enfermedades.
Además, a medida que un germinado se va desarrollando, la vitamina A puede multiplicar casi diez veces su contenido original.
La vitamina A tiene una serie de propiedades antiinflamatorias que pueden mejorar la fuerza y la función del sistema inmunitario.
Pueden ayudar en el cuidado de los ojos
La vitamina A se ha asociado con una mejora de la salud de la visión durante muchos años. Además, la vitamina C actúa como agente antioxidante que puede proteger las células de los ojos de los radicales libres.
De este modo, los brotes pueden ayudar a prevenir el glaucoma, las cataratas y la degeneración macular.
De hecho, también puede ayudar a mejorar la visión, así que come tus germinados y empieza a ver el mundo con un poco más de claridad.
Pueden aliviar el herpes labial
El herpes labial puede ser una condición antiestética, dolorosa e incómoda de sufrir. Si se infectan, pueden incluso convertirse en un grave riesgo para la salud.
Existe un aminoácido específico, llamado lisina, que inhibe el crecimiento del herpes labial y lo trata si aparece.
¡Esta enzima puede encontrarse convenientemente en cantidades significativas en los brotes!
Pueden reducir las reacciones alérgicas
Algunas variedades de germinados, como los de brócoli, pueden estar relacionadas con la reducción de las reacciones alérgicas, incluyendo el asma, que es una condición inflamatoria del sistema respiratorio.
Aunque la vía química exacta no se conoce del todo, se están llevando a cabo continuamente investigaciones sobre este tema.
Precaución: Los germinados son mucho más beneficiosos cuando se consumen crudos; sin embargo, también se han asociado a brotes de enfermedades bacterianas transmitidas por los alimentos, como la E. coli y otras infecciones potencialmente graves.
Sólo debes comprarlos en fuentes o tiendas de comestibles de buena reputación, y asegurarte de lavarlos bien antes de servirlos en una ensalada o como adorno de un plato.
Aparte de esta preocupación, son una forma deliciosa y nutritiva de añadir un poco de estilo a su comida y algunos beneficios para su salud.
